Todas las personas buscamos ser felices. Desde que nacemos se nos motiva a que sea nuestra principal meta en la vida. ¿Pero en qué consiste exactamente ser feliz? y sobre todo ¿Cómo se logra?
Filósofos, pensadores, escritores y en general todos los seres humanos, a lo largo de nuestra vida, intentamos encontrar las definiciones, respuestas, claves, pasos y/o las reglas para alcanzar la felicidad. Y parece que esa búsqueda continúa, la gente se ha apegado a ciertas acciones, filosofías, artes, ideologías que los han acercado de cierta manera a la felicidad y la paz interna: la terapia, el yoga, el ayahuasca, la meditación, la filosofía, las artes y expresiones artísticas, entre muchas otras. Sin embargo, el ser humano lidia con el hecho de que la felicidad no la encuentra de manera permanente, que aunque si llega a sentirse más plenos y feliz, aún así tiene momentos en donde decae de ese estado de felicidad.
Este artículo, aunque no es ni un resumen, ni una reseña del libro de Schopenhauer, si concuerda en parte con la mayoría de sus recopilaciones filosóficas resumidas en “50 reglas de vida”. Eso sí, desde una visión mucho más positiva del mundo, del ser humano y de la vida, de la que tenía Schopenhauer; pues pienso que ser realista en cuanto a la felicidad se refiere, no tiene que ser sinónimo a ser pesimista como planteaba este filósofo; ya que la postura que tomamos ante la realidad es una elección, podemos ser realistas pesimistas o realistas positivos.
Retomando el tema central de este artículo, más que ser inalcanzable, la felicidad es un concepto complejo, que la sociedad ha distorsionado o definido, de manera que es inalcanzable. Se nos hace creer que cuando se alcanza la felicidad nunca más se va y que son una serie de factores los que la aseguran: la belleza, el dinero, tener todo aquello que se sueña y se desea, etc. Sin embargo, la sociedad contemporánea ante la verdadera “infelicidad” e “insatisfacción” de la mayoría de los seres humanos, debido a este prototipo de “felicidad” fuera de la realidad, ha caído en cuenta en la importancia de la transformación de este concepto y sobre todo del mensaje que la sociedad emite como ideales para alcanzar la felicidad. Bajo esta nueva perspectiva, hace un par de años, leyendo sobre budismo, encontré el término de “felicidad trascendental-suprema” o “ananda” en sanscrito, él cual describe una felicidad que va más allá de la sensación de alegría de un momento en específico o producto de una determinada situación, una felicidad independiente de momentos y contextos, una felicidad que incluso se siente en los momentos dolorosos, aunque suene contradictorio; es básicamente, una actitud de gratitud y armonía con la vida misma y ante lo que nos brinda momento a momento, como por ejemplo, los beneficios, experiencia y aprendizaje que indirectamente cada situación “buena” o “mala” ofrecen a cada persona.
A continuación, te comparto 8 Tips para convertirte en un artista del arte de ser feliz:
1. BUSCA LA FELICIDAD TRASCENDENTAL
No te limites a ser feliz solo ante determinadas circunstancias. Suena fácil, pero requiere constancia y disciplina. Aunque no lo creas puedes lograr ser feliz incluso en los momentos difíciles de la vida, mantener esa actitud y estado de felicidad a pesar de las circunstancias. Cómo dice Schopenhauer, “Cuando alguien es rico, joven, bello y famoso, hay que preguntarse si además es alegre para enjuiciar su felicidad; mas a la inversa, si es alegre, no importa si es joven, viejo, pobre o rico: es feliz. Por ello debemos abrir todas las puertas a la alegría, cuando sea que llegue”. Como ya mencioné anteriormente, la felicidad que la sociedad nos ha vendido, se limita a logros, a metas alcanzadas, a estatus, a posesiones, pero la verdadera felicidad es una elección, es un estado que puede aprenderse y ya aprendido, es un estado al cual uno debe apegarse. Te comparto un pequeño ejercicio que hice: hace un par de años me di cuenta en mi terapia que compraba mucho y que cuando no lo hacía me sentía ansiosa y vacía. Había estado intentando llenarme y ser feliz a través del consumismo que la sociedad inconscientemente nos impone, pero un día decidí demostrarme a mí misma que podía ser feliz sin compra, sin tener más, simplemente con lo que tengo, así que me puse el reto de no comprar nada material en 6 meses, nada, nada, lo único que podía comprar eran alimentos o pagar experiencias, por ejemplo ir al cine o al teatro; y como conclusión, puedo decir que fue una experiencia que me influyó positivamente en muchos sentidos, me sentí liberada de los deberías y las imposiciones sociales, me di cuenta que no necesito unos jeans nuevos o unos zapatos nuevos para sentirme plena, aprendí a disfrutar más y sobre todo empecé a llenarme con experiencias, con momentos, con el simple hecho de estar viva y no con cosas. Tal vez puedes hacer algo similar, identificar a través de que estas buscando la felicidad: dinero, cosas materiales, otras personas, etc. y hacer un ejercicio que te libere totalmente de esas dependencias, porque las dependencias lo único que generan es infelicidad. Sé libre, sé feliz!
2. VIVE Y DISFRUTA EL AHORA, EL PRESENTE ES LO ÚNICO QUE TIENES
Hay un libro que se llama “El poder del ahora” de Eckhart Tolle que para mí es una verdadera joya. ¿Cuánto tiempo no perdemos pensando en lo que hemos hecho o pudimos haber hecho en determinado momento en vez de hacer en el momento presente? ¿Cuánto tiempo no perdemos pensando en lo que haremos cuando tengamos el coche de nuestros sueños, hayamos bajando de peso, tengamos dinero o una persona que nos ame en vez de disfrutar las cosas que si tienes hoy? Los planes y las preocupaciones a futuro, o también la nostalgia del pasado nos ocupan tan plena y constantemente que casi siempre menospreciamos y descuidamos el presente. Y, entonces somos “felices” en un pasado que ya no existe o somos “felices en un futuro” que aún no llega y no sabremos si llegará y mientras tanto somos infelices en el presente. A través de mi terapia he logrado estar más en el ahora, una de las actitudes que más me ha servido es entregarme a mis sentidos, si vas a escuchar un concierto concéntrate en los sentidos, si vas a comer un helado entrégate a los sabores, si vas a ir al gym concéntrate en tus músculos y las sensaciones, entrégate a cada cosa que hagas, vívela a consciencia.
3. VALORA Y CUIDA LO QUE TIENES
Schopenhauer refiere en su libro “El arte de ser feliz” que, debemos intentar conseguir ver aquello que poseemos, con la misma mirada como lo estaríamos mirando si alguien nos lo quitara; sea lo que sea, posesiones materiales, trabajo, salud, amigos, familia, pareja y/o hijos, la mayoría de las veces sólo sentimos su valor después de haberlos perdido o deseándolos, pero jamás ya que se tienen.
Al mirar todo aquello que no tenemos solemos pensar “¿cómo sería si eso fuese mío?”, y de este modo llegamos a sentir la falta. En lugar de ello, ante las cosas que poseemos deberíamos pensar a menudo “¿cómo sería si perdiera esto?”.
4. NO GENERALICES
Muchas veces pasa algo que se sale de tus planes o de lo deseado y parece como si todo se nublara. Schopenhauer habla en su regla número 15 de esta tendencia absurda a generalizar situaciones displacenteras a otras situaciones de nuestra vida: “Debemos poder abstraer, debemos pensar, arreglar, disfrutar, sufrir cada cosa en su momento, espacio y en su medida, sin preocuparnos de todo lo demás; tener, por así decirlo, cajones para nuestros pensamientos, emociones y/o situaciones, donde abrimos uno y cerramos todos los demás. Así, una grave preocupación no nos destruirá cualquier pequeño placer actual privándonos de todo sosiego; una reflexión no desplazará a otra; la preocupación por un asunto grande no alterará en todo momento la preocupación por cien asuntos pequeños.”
5. ENTRENA A TU MENTE, LA FELICIDAD DEPENDE DE TU PERCEPCION
Es una responsabilidad personal y una base primordial para ser feliz nuestra visión e interpretación de las situaciones y el mundo. Tú eres dueño de tu cuerpo, de tu cerebro y de los pensamientos que generas a través de él. Si tú decides pensar positivo así será. El humor, por ejemplo es un tiempo de pensamiento y actitud que ayuda a que las circunstancias externas desfavorables y hostiles se sobrelleven mejor. Las cosas o situaciones no producen nuestra felicidad o nuestra amargura, más bien es nuestra manera de comprenderlas e interpretarlas lo que genera nuestro estado de ánimo. Schopenhauer lo expone en su regla número 38: “Para bien y para mal es mucho menos importante lo que le sucede a uno en la vida que la manera en que lo experimentamos. Para la felicidad de nuestra existencia, el estado y la condición de la conciencia es absolutamente lo principal.”
6. SE CONSCIENTE DE TU FINITUD, MORIRAS, TODOS MORIREMOS.
Cómo ya algunos saben, soy amante de Irvin Yalom, un psicólogo existencialista que como pilar principal de su teoría, habla de la consciencia de la propia muerte como base importante para tener una existencia consciente, plena y feliz. Saber que no tenemos todo el tiempo del mundo y no solo que nuestro tiempo esta contado, sino que no sabemos exactamente cuándo terminará, nos hace conscientes de vivir cada momento a profundidad, dándole un valor más grandioso. Del mismo modo, Schopenhauer expone en su regla 25 la importancia de ser consciente de nuestra limitada existencia: “Una de las insensateces mayores y más frecuentes es hacer amplios preparativos para la vida, no importa de qué tipo sean. En relación con ellos también se calcula al principio la plena duración de una vida humana a la que, sin embargo, sólo muy pocos alcanzan. Pero además, aunque vivieran tanto tiempo, es demasiado corta para los planes, porque su realización siempre requiere más tiempo del que se suponía……” o cómo refiere el gran filósofo griego Horacio “¿Por qué esfuerzas a tu espíritu demasiado débil para planes eternos?” ¡Despierta!, la vida no es infinita
7. NO TE REPROCHES, NI TE CULPES…LA AUTO-VICTIMIZACIÓN NO SIRVE PARA NADA
Así como hablábamos anteriormente de la importancia de responsabilizarse de los propios pensamientos e interpretaciones, es importante responsabilizarnos de nuestras acciones y sus reacciones. Sin embargo, muchas veces la gente comete errores y en vez de responsabilizarse actuando para cambiar dicha situación, se lamenta y se culpa. Pero los reproches y culpas no cambian o mejoran las situaciones desfavorables o los errores, únicamente las remarcan más. No seas tu propio verdugo. Aprende y cambia. Si de por si te encuentras en una situación desagradable que tú has generado, hacerte sentir mal a ti mismo te dificultará más las cosas. Salte del pozo, no te quedes dentro de él.
8. CONÓCETE
Hace unos días vi el documental “La cura de Yalom”, en este documental Yalom expone que lo más importante para generar cambios positivos en nuestras vidas y con ello lograr ser felices reside en conocernos a nosotros mismos. Ya que las partes de nosotros que menos conocemos o que evitamos conocer o que descuidamos, son justo las que nos generan conflicto y nos alejan de ese estado de verdadera felicidad. Igualmente, hace poco leí una frase de “Agnes Repplier” que dice: “No es fácil encontrar la felicidad en nosotros, pero es imposible encontrarla en ningún otro lugar”. Y coincido, pues claro que representa un esfuerzo y un compromiso tomar el tiempo y tener el valor para ver dentro de uno mismo, pero solo de esta manera, conociéndonos, podemos ser sinceros con nosotros mismos, con nuestro sentido de vida y de esta manera ser felices.